10,35 x 47 R Italian Vetterli M.1870-71 – M.1890

HISTORIA:
En 1870, el gobierno italiano decide sustituir sus rifles reglamentarios (de avancarga convertidos a retrocarga con cartucho de papel y fulminante en la base de la bala) por lo más moderno que había en el mercado: el rifle suizo Vetterli, pero con un cartucho de fuego central en vez de anular.
Sin embargo, no consideraron el cargador tubular como un avance significativo y crearon toda la familia del modelo 1870 (rifle, carabina de caballeria, carabina de Carabineros y carabina para tropas especiales) como armas monotiro al estilo de nuestro Rémington 1871. Años más tarde tuvieron que ser modificados para añadir un cargador para cuatro cartuchos.
Francia y Alemania/Austro-Hungria, potencias imperialistas demasiado cercanas, adoptaron rifles y municiones modernos en la década siguiente (8×51 R Lebel en 1886 y 7.92×57 en 1888), que convirtieron en obsoletas e ineficientes las armas de gran calibre y pólvora negra. El nuevo Vetterli-Vitale modelo 1870/87 fue la solución de emergencia. Era básicamente un Vetterli capaz de disparar el mismo cartucho pero con pólvora sin humo y bala con envuelta. No era la solución, sino un apaño. En 1891, por fin, aparece su sucesor: el Mannlicher-Cárcano en calibre 6.5×52.
En Agosto de 1936, al poco de comenzar la guerra civil, el gobierno de la Unión Soviética decide enviar ayuda militar a la república española. En una primera fase, vacía los almacenes de armas obsoletas o capturadas durante la 1ª guerra mundial y la revolución comunista. Como resultado de esta política, llegó a España un arsenal de lo más variopinto y extraño, en una variedad de calibres sorprendente. Entre otras armas curiosas, llegaron en este periodo 16.000 Vetterli M 1870 monotiro. La escasez de munición para este arma y lo anticuado de su diseño hicieron que se relegase rapidamente a medida en que pudo ir consiguiéndose armas más modernas.