.30 Cup Fire

HISTORIA:
Cartuchos diseñados por Willard Ellis y John White y patentados en julio 1859 para su uso en revólveres de fuego anular Plant y Eagle que se cargaban por delante del tambor para evadir la patente Rolling White que tenia en exclusiva Smith&Wesson.
Los distribuidores en exclusiva de los revólveres y de la cartuchería eran Merwin & Bray y estos fabricaban en las fábricas de sus asociados: inicialmente por Plant Manufacturing Co. de New Haven Ct, FVV&Co. de NY o NY Metallic Ammunition Co y finalmente por Phoenix Metallic Cartridge Co. y su sucesora American Metallic Cartridge Co. de South Coventry, Ct.
Sólo se conocen marcajes de estos dos últimos fabricantes (P resaltada de Phoenix y A resaltada de American) y únicamente para el calibre .30.
Tienen el fulminante dispuesto alrededor de la base cóncava del cartucho, y la bala a ras del borde de la vaina, con el espacio relleno de grasa. La boca puede tener un ensanchamiento que facilita la extracción y hay un estrechamiento en la vaina que sujeta la bala.
Para el calibre .28 se pueden distinguir dos tipos: los de base cóncava y los de base plana rehundida, con variaciones en el crimpado o estrechamiento de la vaina para sujetar la bala.
En el calibre .30 además de los marcajes citados, la cavidad tiene diferentes profundidades, siendo entre 1,7 y 2,2 mm para los cartuchos sin marcaje y los 2,5 mm de Phoenix o 2,7mm de American. Parece que inicialmente la copa era menos profunda, pero este es un extremo que habría que comprobar.
En el calibre .42 hay variaciones en la ranura de sujeción de la bala, habiendo ejemplares que la tienen muy profunda y otros en los que casi no se aprecia. La base es siempre cóncava.
Se fabricaron en los calibres .28 Cupfire, .30 Cupfire y .42 Cupfire. El calibre se expresa por el diámetro de la vaina, no por el de la bala que es .26,.28 y .39 respectivamente.
El .28 y el .42 sólo se fabricaron hasta finales de los 1860.